El debate organizado por la FCFM puso el acento en las acciones propuestas por los candidatos para la institución, la comunidad universitaria y el país, conducentes a la universidad que sueña a futuro.
La discusión de ideas se realizó en un auditorio Enrique d’Etigny repleto y una transmisión en vivo que permitió expandir los respectivos mensajes.
El debate, que fue moderado por la presidenta del Centro de Estudiantes de Ingeniería (CEI), Nicole Martínez, comenzó con una introducción de cada candidato a sus ideas fuerzas, con miras a cómo quisieran ver a la U. de Chile para el año 2042.
“Tengo el gran convencimiento de que puedo hacer un aporte significativo para esta universidad", comenzó Patricio Aceituno. "Quise inscribir mi candidatura con un telón de fondo y ese telón es Chile (…) y planteo un proyecto bajo la mirada de que Chile puede ser un país desarrollado, Chile merece ser un país desarrollado”, agregó.
En ese sentido, aclaró que su propuesta no se centra en una mirada económica exclusivamente, “sino lo digo pensando en un país más integrado, más justo, más equitativo, en todos sus aspectos”. Para dar ese salto, sostuvo Aceituno, es urgente un cambio de calidad en la educación que se entrega en todo el país desde la escolaridad, así como en un incremento de la inversión en investigación.
Este énfasis, explicó Aceituno, es el fundamento de los focos de su campaña donde se plantea la urgencia de que la Universidad de Chile tome las acciones necesarias para impactar en las decisiones de país para el desarrollo de una mejor educación.
Asimismo, añadió, se plantea la necesidad de liderar a la Casa de Bello para generar el otro cambio político pendiente: incrementar el presupuesto en investigación y generación de conocimiento. “Chile nunca será un país desarrollado si no invierte más en conocimiento, si no invierte más en ciencia, tecnología, innovación y conocimiento en todas sus disciplinas”, explicó.
“Si Chile no provee de una mejor educación a Chile y mejora su inversión en investigación está condenando al país a un permanente subdesarrollo (…) Chile está estancado, no hay una voz potente. El rector está llamado a liderar un cambio de política en esta materia".
Dentro de las acciones que propone el actual decano de la FCFM se encuentra el “destinar un millón de dólares anuales por los próximos cuatro años para apoyar proyectos bien evaluados que no son subvencionados por fondos del Estado simplemente porque la política actual de financiamiento de la ciencia está agotada y requiere recursos adicionales”.
En tanto, el candidato Ennio Vivaldi destacó el aporte de su equipo directivo durante su período en la rectoría, refiriéndose a los miembros que provienen de la FCFM, para resolver temas de unidad en la Universidad de Chile. También enfatizó dentro de los logros de su período el haber visibilizado “el rol verdadero de la Universidad de Chile”.
"Se reinstaló el concepto de universidad pública en Chile, eso antes no existía (…) creo que demostramos que se puede ganar una pelea si es llevada como la hicimos nosotros y con la unidad de toda la Universidad de Chile (…) Hoy somos una universidad proactiva, una universidad con capacidad de propuestas", señaló.
En este contexto, Ennio Vivaldi repasó una serie de logros que vincula a su rectorado como la recuperación de Laguna Carén a través de un proyecto académico, la gestión para revertir la crisis del Hospital Clínico de la Universidad de Chile cuyo destino se discutió al interior del Consejo Universitario y el reconocimiento del CIAE como un Instituto de Estudios Superiores.
“Creo que la situación de hoy es totalmente distinta para hablar de futuro, hoy día sí que podemos hacerlo”, concluyó.
Equidad de género e inclusión
En este eje temático, el candidato Vivaldi se refirió a los obstáculos culturales que dificultan la equidad de género en Chile y destacó las medidas que ha implementado su rectorado en esta materia, tales como la Dirección de Género dependiente de Rectoría y los protocolos frente al acoso.
Patricio Aceituno, en tanto, opinó que era necesaria una política transversal en la Universidad de Chile para abordar las desigualdades asociadas a razones de género, tales como desigualdad de remuneraciones o situaciones culturales que dificultan a las mujeres adquirir una carga mayor de responsabilidades.
Composición del estudiantado: ¿Excelencia, equidad o ambas?
Patricio Aceituno afirmó que sus proyecciones para la composición estudiantil de la Universidad de Chile en 20 años más sea igual que la representación de sus colegios de origen, que el porcentaje de colegios particulares y públicos represente la realidad nacional. “Un país que no le otorga igualdad de condiciones en educación a toda su población, como el nuestro, es un país que está condenado a ser siempre subdesarrollado. Y va a tomar tiempo revertir la situación. La Universidad de Chile tiene una muy baja participación en la educación en nuestro país. El 1,5% de los profesores que están ejerciendo en el país fueron formados en esta universidad. Tenemos que movernos en esa línea, tenemos que aumentar nuestra participación, pero por sobre todo tenemos que aumentar nuestra participación en investigación en educación".
Asimismo, Ennio Vivaldi sostuvo que “no puede haber una universidad de excelencia si en su interior no está representado el conjunto de variedad de todo el país incluyendo el factor socioeconómico. Por lo tanto, lo que se ha hecho este tiempo por inclusión no les quepa duda que es algo que contribuye a jóvenes que han vivido situaciones muy injustas, eso, la Universidad de Chile lo ha hecho de manera excelente”.
Organización interna
Para el candidato Vivaldi es necesario pasar a una hibridación de las disciplinas, dando un paso más allá de la transdisciplinariedad. Enfatizó que recién se dan las condiciones para hacer realidad esta forma de gestionar la Universidad, refiriéndose a la oportunidad de Laguna Carén con dos centros y laboratorios a instalar con financiamiento que consiguió en su rectorado.
Por su parte, Patricio Aceituno defendió la disciplina de primer nivel y se mostró a favor de fomentar prácticas en este aspecto. “Tenemos muy buenos ejemplos de imitar de esta facultad y a nivel central: proyecto CR2 que tiene gente de Geografía, de Facso, de Derecho. Proyecto CEBIB que se lleva a cabo en el Departamento de Ingeniería Química, Biotecnología y Materiales en esta facultad, que se desarrolla con otras universidades estatales. (…) ¿qué vamos hacer en el futuro? Yo propongo como una medida, que puede ser muy menor, realizar visitas entre los Consejos de Facultad para conocer las realidades de cada una de las facultades y poder avanzar en la colaboración”.
Institucionalidad en ciencia y tecnología
Sobre este tema, el actual rector de la Universidad se refirió al valor de la nueva ley de educación superior que consagra la creación de un consejo de coordinación de universidades estatales que articula estas instituciones entre sí y con el Estado, con la posibilidad de conversar con los ministros de manera directa.
“Hay 500 millones de dólares para el fortalecimiento a las universidades estatales. Esos medios nos permiten incrementar nuestra presencia. Volvemos a tener una presencia nacional a través de este consejo coordinador (…) Aquí, lo más importante es que cambia la forma en que el país ve a la Universidad de Chile y que cuando habla es un agente importante, carente de vínculo con otro tipo de intereses y que está de nuevo pensando por todos los chilenos”, sostuvo.
“La idea de que la Universidad de Chile es parte del Estado es algo que hicimos nosotros, ahora recién, una pelea que dimos y ganamos”, concluyó Vivaldi.
Siguiendo en este tema, el candidato a rector Patricio Aceituno sostuvo que es importante realizar diagnósticos correctos. Sobre el reconocimiento de las universidades estatales en la nueva ley, opinó que no es suficiente. “Esta ley no nos ayuda a dar el salto que queremos”.
Según detalla, los números indican que habrán 300 mil millones de pesos durante 10 años, vale decir 30 mil por año, de lo cual el 10 por ciento le tocará a la U. de Chile. “¿Cuánto le va a tocar a la Universidad de Chile? ¿Cuánto son 3 mil por año…? Dos proyectos Fondap por año, 2 proyectos basales. Esa ley no nos va a sacar adelante. No va a ser por el fondo de apoyo a las universidades estatales”.
En este sentido, Aceituno se refirió a la gestión interior para corregir el trato de desconfianza que se le da a las universidades, a través de los mecanismos de financiamiento que exigen externalizar la administración de ciertos proyectos de grandes volúmenes. “No puede ser que el Estado nos ningunee diciendo: 'ustedes no saben administrar los recursos, así que formen una corporación aparte'. Creo que hay que mejorar la gestión al interior de la Universidad para que no sea una carga para estas instituciones trabajar al interior de la Universidad. No creo que sea una buena señal externalizar, sacándole los recursos de la universidad y poniéndola en la vereda de al frente porque se desconfía de las capacidades de nuestra Casa de Estudios”, concluyó.
