Con la presencia de las máximas autoridades académicas, colegas y amistades, el Prof. Francisco Brieva Rodríguez, ex decano de la FCFM, junto al profesor de la Facultad de Derecho Paulino Varas, recibieron la versión 2017 de la Medalla Juvenal Hernández Jaque en las menciones de ciencia y tecnología, y humanidades, respectivamente.
El solemne acto reunió a la comunidad universitaria en el salón Ignacio Domeyko de la Casa Central de la Universidad de Chile, donde fueron presentadas sus profusas trayectorias académicas, de investigación y administrativas en la actividad universitaria y pública, desde su egreso de la Casa de Bello.
El galardonado de la versión 2016 en la mención de ciencia y tecnología, Prof. Rodolfo Armas Merino, compartió con los presentes la vertiginosa carrera del Prof. Francisco Brieva, quien ya a muy temprana edad alcanzó la “celebridad inmediata” fruto de sus primeras publicaciones científicas. En adelante, repasó el historial de los numerosos compromisos de gestión y administración que adquirió en su departamento y en distintas unidades de la FCFM, hasta su decanato, período en el que guió importantes proyectos de desarrollo, actividad que continuó en el servicio de entidades públicas a las que fue convocado.
Recordó el más reciente de los reconocimientos recibidos: la Medalla de Oro, máxima distinción que entrega el Instituto de Ingenieros de Chile, y expresó su convicción de estar representando a muchas personas en sus sentidas palabras de agradecimiento por sus aportes al país y a la universidad.
Por su parte el rector Ennio Vivaldi expresó su cariño y admiración por ambos homenajeados, a quienes se refirió para develar un común denominador que une a los egresados de la Universidad de Chile y que se reproduce en las distintas disciplinas. La autoridad universitaria señaló que el complejo de edificios Beauchef 851, inaugurado en 2014, en gran medida fue fruto de la visión de futuro y liderazgo del Prof. Brieva para conducir a su Facultad.
En la ocasión compartió también el placer que le otorga escuchar a Francisco Brieva, por su talento de elaborar discursos que siempre van de la mano de una "inteligente articulación de mensajes" con una "estética de belleza" en el hablar, comentario que hizo luego de que los presentes tuvieran la oportunidad de escuchar al Prof. Francisco Brieva en sus reflexiones sobre la "encrucijada que vive el sistema científico-tecnológico nacional".
Romper la espiral de la mediocridad en el desarrollo científico-tecnológico
En su intervención durante la ceremonia, el Prof. Francisco Brieva interpeló a la comunidad universitaria a despertar y empoderarse de la misión de pensar el país y construir el desarrollo de Chile. En este contexto opinó que la investigación que realiza la universidad es sustancial “para pensar, entender, interpretar, abrir los nuevos espacios con libertad, sugerir las nuevas concepciones a partir de secuencias intelectuales coherentes u observaciones del entorno social o natural con su aceptación de la crítica universal”.
Frente a un desarrollo científico-tecnológico nacional que calificó de mediocre, identificó como urgente fortalecer los "medios" y la "preparación" para una investigación que haga avanzar a Chile. Al respecto afirmó que tanto la preparación como la valorización de la investigación frente a los tomadores de decisiones en la sociedad “es responsabilidad nuestra, indeclinable. Las excusas retardan el desarrollo”.
“Tenemos, como país, el tema central de su desarrollo no resuelto. Al ignorar establecer políticas públicas de largo plazo y evitar invertir en ciencia y tecnología, se ha hipotecado nuestro futuro. Y seguirá ocurriendo. Nada ha sido mencionado sobre el tema por los candidatos a presidir la Nación a partir de marzo próximo. ¿Es desidia, falta de visión o simple ignorancia? El futuro no es tema, la dinámica que adquiere el conocimiento refinado y su impacto en las demandas de la sociedad parece atemorizar a nuestra clase política. Pero no es sólo cuestión de políticos. Yo observo sorprendido el conformismo de nuestros estamentos ilustrados: ni las universidades, ni las academias, ni los investigadores alzamos una opinión fuerte, inteligente, específica, sobre cómo avanzar en el desarrollo científico-tecnológico. Parece existir un temor reverencial a interpelar, a debatir, a confrontar ideas y argumentos, prácticas olvidadas para algunos y desconocidas para otros. Los costos personales parecen altos en el tráfago cotidiano. Mi ejemplo actual preferido es la propuesta del gobierno sobre la creación de un Ministerio de Ciencia y Tecnología, interesante coincidencia con el congelamiento de los recursos económicos para ciencia y tecnología en el presupuesto de la Nación 2018”, reflexionó en su llamado a toda la comunidad universitaria a revertir esta situación.
Leer trayectoria aquí
