Después de la exitosa climatización del Liceo Altos del Mackay en Coyhaique, y de una nueva experiencia con bombas de calor geotérmicas en la escuela Luis Cruz Martínez de Curacautín, en la región de La Araucanía, el Centro de Excelencia en Geotermia de Los Andes (CEGA) se abocó a la tarea de encontrar un nuevo establecimiento educacional de la Región de Aysén, en la comuna de Cisnes, luego de que la División de Acceso y Desarrollo Social del Ministerio de Energía destinara cerca de $350 millones para tales efectos.
El Liceo Arturo Prat, en la comuna de Cisnes (cerca de 200 kms. al norte de Coyhaique), fue seleccionado tras un riguroso estudio de prefactibilidad por parte de investigadores del CEGA, y será parte del convenio que busca implementar proyectos para calefacción en base a energía geotérmica de uso directo en establecimientos educacionales en zonas rurales a lo largo del país, con el fin de mejorar la calidad de vida de la comunidad escolar a través del reemplazo de la leña por geotermia. En una zona con clima muy frío y lluvioso, donde la calefacción forma parte sustancial de la vida, el liceo resultó ser la opción idónea para recibir este innovador sistema de calefacción, siendo además un establecimiento con un alto índice de vulnerabilidad escolar (IVE de 87%), por lo que poder intervenir e impactar en su comunidad resulta doblemente relevante.
Julio Cuadra Stipetich, jefe de la División de Acceso y Desarrollo Social del Ministerio de Energía, precisa “este proyecto se enmarca en la línea de acción de Mejoramiento del suministro energético en escuelas rurales, comprometida en la Ruta Energética 2018-2022, que busca mejorar las condiciones de confort térmico al interior de los establecimientos, así como facilitar el acceso a agua caliente y a un suministro eléctrico continuo y seguro, a través de soluciones limpias y sostenibles. En este sentido, la Ruta Energética estimula la implementación de proyectos térmicos renovables, destacando el uso directo de la geotermia”.
Por su parte, el Seremi de Energía de la Región de Aysén, Juan Luis Amenábar, afirma que “recibimos con mucha alegría esta buena noticia, plenamente acorde con nuestra Política Energética Regional, que busca aprovechar cada día más nuestras energías renovables en desmedro de las más contaminantes, como es la leña húmeda. Brindar calefacción limpia a una comunidad escolar mediante la geotermia genera impactos positivos para la comunidad, no solo ambientales, sino que además va generando desde temprana edad en los estudiantes una conciencia de cuidado al medio ambiente y buen uso de los recursos renovables, algo esencial en la formación de las futuras generaciones”. A su vez, el alcalde de Cisnes, Francisco Roncagliolo, se manifestó muy agradecido por la selección de la comuna para la implementación de este nuevo proyecto que aprovecha la geotermia y que significará un importante cambio en el liceo seleccionado.
Para Mauricio Muñoz, investigador CEGA y coordinador del proyecto, “representa un lindo desafío poder nuevamente como CEGA climatizar un establecimiento educacional de la Región de Aysén. Estamos en una zona del país con enormes requerimientos de calefacción y que tiene excelentes condiciones para el desarrollo de la geotermia, la que resulta ser una alternativa sustentable, amigable con el medio ambiente y lo mejor de todo es que estamos reemplazando la leña que tanto ha contaminado el aire de la región y que pone en riesgo sus bosques”.
En la actualidad, el colegio es calefaccionado con una caldera a leña y apoyo con combustiones lentas en las salas, y la expectativa es poder reemplazar este uso en el 100% de las salas de clases y en algunos espacios compartidos tales como pasillos, patios interiores, oficinas, etc. En total, el proyecto contempla 1.300 m2 de cobertura a través del uso directo con bombas de calor geotérmicas y un sistema de distribución de calor centralizado.
La ejecución de este proyecto se extenderá por todo el presente año y parte de 2022, esperando estar operativo para el invierno del próximo año, con temperaturas estables que tendrán un promedio de 22°C, beneficiando a cerca de 210 alumnos, profesores y asistentes de la educación que tendrán al calor de la tierra ayudando a mejorar su calidad de vida y aprendizaje.