Según el informe State of Science Insights 2024, una encuesta realizada por 3M por séptimo año consecutivo para conocer las percepciones globales de la ciencia, la mitad de la comunidad latina encuestada reconoció que el cambio climático está afectando a sus comunidades. En esta línea, la cuarta edición del concurso "25 Mujeres en la Ciencia" estuvo enfocada en sustentabilidad ambiental, especialmente en el reconocimiento a proyectos que buscan minimizar el impacto de los problemas asociados al cambio climático que preocupan a la región.
Entre las ganadoras del concurso internacional de 3M este 2024 destacan científicas de México, Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Canadá y dos investigadoras de nuestro país, ambas egresadas de la Universidad de Chile: Maibelin Rosales, doctora en Ciencias de la Ingeniería, mención Ciencias de los Materiales de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) y actual investigadora postdoctoral del Centro Avanzado de Tecnología para la Minería de la misma unidad, y Daniela Quiñonez, profesional egresada de Ciencias Ambientales con mención en Biología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile.
Maibelin Rosales fue premiada por su innovadora propuesta que aprovecha la luz del sol para activar nanomateriales especialmente diseñados para disociar el hidrógeno del oxígeno en el agua y, de esta manera, generar Hidrógeno Verde (H2V). El escalamiento de esta tecnología alimentada completamente por energía solar podría revolucionar la industria del H2V, y contribuir a la lucha contra el Cambio Climático. La elevada radiación solar de Chile favorece esta tecnología, además, brinda una oportunidad para ser pioneros en avances nanotecnológicos solares y promover la transición energética basada en los recursos naturales locales.
Respecto a este reconocimiento, la investigadora comenta que, “desde pequeña, el amor por la magia que hay detrás de la ciencia ha sido un motor que hoy ha germinado en mi carrera científica. Es por ello que para mí es un honor hoy ser galardonada con este reconocimiento de 3M a mi trabajo y trayectoria científica. También es un reconocimiento a la generación de innovadoras soluciones tecnológicas locales, en mi caso basadas en nanomateriales, que buscan aprovechar fuentes renovables como el Sol para obtener energía limpia. Este es un proceso de fácil implementación, autónomo por ser alimentado por luz solar y ojalá de menor costo en el futuro cercano, para permitirnos avanzar hacia la transición energética”.
Daniela Quiñones, en tanto, fue distinguida por su diseño de biocarbonos funcionalizados para sistemas agrícolas con macronutrientes a partir de residuos de la industria. Esta línea de investigación busca responder a la demanda de alimentos, que aumentará en un 70% para 2050, así como aportar a la economía circular en el país. Sobre este trabajo, la especialista en ciencias ambientales explica que los biocarbonos son materiales altamente porosos que les permiten retener agua, ser refugio de microorganismos necesarios para el crecimiento de cultivos, y servir como biorremediadores del suelo. Además, si son funcionalizados con micronutrientes, serán capaces de fertilizar el suelo de forma ecoamigable y sostenible.
“Necesitamos visibilizar el rol de la mujer en las ciencias”
Sobre la importancia de reconocer el rol de las mujeres en la ciencia, Daniela Quiñones asegura que “es fundamental hoy en día. La última radiografía de género realizada por el ministerio CTCI indica que tardaremos 136 años en cerrar la brecha de género en las áreas STEM. Además, en la región, Chile muestra una baja participación femenina en áreas STEM, contando con un 36% del total de investigadores activos que se identifican con el género femenino. En este sentido, necesitamos visibilizar el rol de la mujer en las ciencias, inspirando y motivando a más niñas a ver las STEM como una opción profesional a futuro y que sean parte de las soluciones, que necesitamos sean diversas y para todos y todas.”
“Con este objetivo, es que soy parte activa de Ingeniosas, una fundación que pretende llevar la ciencia y la tecnología a niñas y adolescentes principalmente de contextos vulnerables, realizando talleres donde las estudiantes pueden ser parte activa de su aprendizaje, además de permitirles conectar con modelos de rol, los cuales son fundamentales para motivar a más mujeres en el área. También soy mentora voluntaria del programa PROVOCA, una iniciativa de AUI/NRAO en Chile que tiene como objetivo fundamental promover vocaciones STEM en adolescentes y aumentar la permanencia de estudiantes universitarias en sus carreras del área”, indica la bióloga ambiental.
Maibelin Rosales, por su parte, plantea que “la visibilización del trabajo de investigación y aportes tecnológicos de las mujeres científicas en ámbitos claves para la humanidad, como lo es la sustentabilidad ambiental y lucha contra el cambio climático, es parte fundamental para motivar e incentivar a otras mujeres y niñas por las carreras STEM. Esto les lleva el mensaje de confiar en sus propias capacidades al saber que sí es posible ocupar e insertarse en estos espacios y campo de aplicación, y de que podemos ofrecer aportes valiosos desde nuestro conocimiento e investigación a diferentes áreas. Es muy importante reconocer que, si en la sociedad no existen referentes femeninos en el ámbito científico, difícilmente las niñas desde pequeñas pueden creer que pueden llegar a serlo también".
Un camino que recién comienza
“Como científica enfocada en sustentabilidad ambiental, aspiro a trascender las fronteras de la investigación para llevar esta solución tecnológica desde el laboratorio hasta su implementación, transferencia y aplicación práctica, aportando como una solución tangible para la sociedad. Es por ello que el siguiente paso del proyecto es trabajar en la escalabilidad de la tecnología. Actualmente, el proyecto es financiado por fondos del Estado, y la propuesta es concursar a más fondos públicos que permitan continuar con el desarrollo y maduración tecnológica de esta solución, siendo el próximo paso realizar tanto el escalamiento como su validación en ambientes relevantes", relata sobre los próximos pasos de su investigación Maibelin Rosales.
A futuro, comenta Daniela Quiñones, espera “seguir siendo un aporte para la ciencia tanto de nuestro país como para el mundo. Necesitamos seguir investigando y llevando la ciencia a la comunidad, donde debe ser aplicada. Por otra parte, espero continuar en este camino de inspiración a más niñas y adolescentes en áreas STEM, ya que, así como alguna vez a mí me costó creer que podría dedicarme a una carrera de esta área, siento que mi historia podría motivar a más a seguir sus sueños y ser un aporte para la sociedad a futuro. A veces solo necesitamos a alguien que nos inspire y motive”.
"25 Mujeres en la Ciencia" 2024
Como en ediciones anteriores, el proceso de evaluación estuvo a cargo de un jurado integrado por representantes del área de Investigación & Desarrollo de 3M en la región con amplia experiencia en las áreas de ciencia, investigación, innovación, sostenibilidad y emprendimiento. Entre los criterios evaluados, se analizaron el potencial de impacto social directo o indirecto en la región; innovación y viabilidad del proyecto; madurez de la idea demostrada por los resultados de las pruebas/pilotos iniciales; la capacidad y experiencia del candidato para desarrollar el proyecto presentado; problemas a resolver, innovación y/o solución; y el impacto a nivel local y/o en la comunidad después de su implementación.
“En 3M creemos en el poder de la ciencia para resolver cualquier desafío y en la diversidad como motor de innovación. Es por eso que, con la situación actual del mundo, esta edición estuvo enfocada en dar visibilidad a proyectos que están desarrollando las mujeres para afrontar estas problemáticas actuales, y así darles esa voz y difusión que requieren” comentó Adriana Rius, directora de marca y comunicación de 3M Américas.
La compañía multinacional estadounidense anunció, además, que las 25 científicas ganadoras formarán parte de una plataforma de visibilidad científica, con la inclusión de sus proyectos en el libro conmemorativo “25 Mujeres en la Ciencia”.