La Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) publicó los resultados del concurso Anillo de Investigación en Áreas Temáticas Específicas 2022, en el cual la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile obtuvo dos adjudicaciones con un presupuesto de más de 600 millones de pesos para cada una.
El nexo agua-energía-alimentos para zonas urbanas de Chile central (wef-Chile) es el nombre del proyecto de la académica del Departamento de Geología, investigadora del Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA) y directora del Centro Avanzado para Tecnologías del Agua (Capta), Linda Daniele.

El escenario de crisis climática es fundamental para entender el contexto en que se realizará esta iniciativa. En ese sentido, la intención es que el nexo entre los elementos a estudiar “pueda ser abordado, especialmente, desde el punto de vista de los recursos hídricos, donde podamos aportar a que se entienda mejor la complejidad del funcionamiento de estos sistemas y lo que significa poder aprovecharlos de una manera sustentable”, destaca la investigadora.
El proyecto Anillo tendrá un equipo formado por profesionales del Departamento de Geología, CEGA, Departamento de Ingeniería Civil de la FCFM y la Universidad de O’Higgins, por lo que irá de la mano con otras investigaciones e iniciativas desarrolladas por dichas instituciones relacionadas a geotermia y agua.
Además, explicó que la iniciativa tendrá un carácter multidisciplinario, abarcando la problemática social del uso de esta energía, el agua, y dando la posibilidad de formar nuevos profesionales en las temáticas que se abordarán, las que “no se han estudiado de manera sistemática en las áreas urbanas del país. Es importante trasladar este conocimiento a las y los tomadores de decisiones y la sociedad en su conjunto”, sostiene la investigadora principal del CEGA.
Fortaleciendo el programa espacial de la FCFM
Asimismo, el otro proyecto adjudicado fue Un laboratorio como banco de pruebas para nuevas tecnologías espaciales: de la concepción al espacio, liderado por el académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica y uno de los impulsores del Programa Espacial FCFM, Marcos Díaz, quien, por tres años, utilizará la astronomía espacial a base de CubeSats como motor para consolidar un ciclo de desarrollo ágil de tecnologías espaciales que permitan misiones científicas y de aplicación más sofisticadas pero diseñadas, construidas, evaluadas y operadas en el país.

“Con esto se busca sistematizar el trabajo desarrollado en el SPEL para desarrollar y evaluar en el espacio tecnologías espaciales novedosas, pero que aún se perciben como riesgosas por la falta de herencia de vuelo. El proceso incluye pruebas de laboratorio, pruebas en globos atmosféricos, así como pruebas a bordo de laboratorios espaciales como la Estación Espacial Internacional (ISS) o la plataforma ION (de la empresa D-Orbit) y, por supuesto, en misiones CubeSat de 1 a 6 litros [1U o 1 litro es la unidad estándar de un CubeSat] con el propósito de reforzar los conocimientos y habilidades necesarias para realizar ciencia espacial”, explica el investigador.

Con este Anillo se pretende, además, potenciar la formación de profesionales y generar espacios de divulgación científica en la comunidad escolar y público en general. También se buscará fortalecer la colaboraciones internacionales con la Universidad Aeronáutica Embry Riddle (EEUU), la Universidad Técnica de Delft (Holanda), la Universidad de Tokyo (Japón), la Universidad Chalmers (Suecia), y la empresa Applied Nanolayers (ANL); y las colaboraciones nacionales con la Universidad de Santiago de Chile, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, la Fundación Biociencia, la Comisión Chilena de Energía Nuclear y los centros CATA, CR2 y CMM.